Aun recuerdo cuando era pequeño, las aventuras de tres intrépidos espadachines de la corte francesa del Rey Luís XIII, tres hombres que blandían sus floretes siempre en defensa de una causa justa, “Los tres Mosqueteros”.
Esa imagen podría extrapolarse a mi última salida de pesca en kayak, tres hombres enfundados en “uniformes” de neopreno, a lomos de sus coloridas “cabalgaduras” flotantes y armados esta vez con cañas, que parten en busca de una nueva aventura, en busca de una batalla que aún está por librar.